La protección de datos parte principalmente de la base de que las redes sociales son un terreno «de nadie» a nivel legal. El vacío que existe a este respecto conlleva que las normas legales no se encuentren del todo claras y que no sean acotables de la misma manera que los son otras cuestiones en la realidad. Este es el caso de la difamación, el bullying o las injurias. La reputación online es completamente diferente que la presencial.

Top responsabilidad para la protección de datos en internet

• Responsabilidad personal: Los contenidos que publicamos en las redes sociales, especialmente nuestras imágenes o contenidos personales pueden identificarnos de una u otra manera. Es por ello que tratar de restringir esto es inevitable en el caso de que lo que queramos sea mantener nuestra intimidad, aunque como ya han mencionado numerosos social managers; si no se quiere que se menoscabe la intimidad la mejor opción siempre será no estar en esas redes sociales.
• Uso personal o laboral: Los mayores inconvenientes en el caso de los adultos es que su sitio web profesional debe mantener una reputación por lo que que existan comentarios negativos, no contestados, etc puede dañar la imagen de la empresa. También en el ámbito personal debería mantener las «distancias» a este respecto ya que no es poco común que existan numerosos problemas que procedan principalmente de los inconvenientes de que cualquier persona ajena pueda hacerse con estas cuestiones. Se debe tener en cuenta, igualmente, la importancia que tendrá que todos los usuarios logren lo que buscan del medio web sin padecer consecuencias negativas.