Continúa siendo una de las tareas pendientes del Ministerio la legislación correspondiente al arrendamiento de una vivienda. Sin embargo no siempre es posible debido a que las cláusulas se diluyen tanto para arrendadores como para arrendatarios. En el caso del arrendador, este cuenta con una serie de deberes principales que deben ser tenidos en cuenta desde el primer momento. 

Derechos del arrendador

• El arrendador tiene derecho a recibir una fianza en concepto de garantizar que el arrendado permanecerá durante el tiempo pactado en el contrato.
• El arrendador puede exigir la reparación de daños que haya ocasionado el arrendatario.
• El arrendador puede aumentar el precio de dicho vivienda en el caso de que se quiera optar por mejorar los servicios y prestaciones de una vivienda.
• Las prórrogas que se puedan realizar de dicho contrato estarán atadas a las necesidades de cada usuario.
• En el caso de que el arrendatario no cumpla con los pagos, el propietario podrá proceder al pago de los daños.
• Rescindir el contrato también es otra de las características que normalmente se emplean cuando el arrendatario no quiere hacerse cargo de las condiciones de higiene y de mantenimiento del hogar.

Se debe tener en cuenta que en la actualidad tanto el arrendador como el arrendatario deben contar con el alquiler de una vivienda justamente en el momento en el que quieran cumplir con las máximas propuestas que estén vinculadas a lograr los mejores tipos de intereses, siempre descubriendo una de las mejores propuestas al respecto sin perjuicio de ninguno de los inconvenientes a tener en cuenta.